Las Emisiones tóxicas de los motores diésel son ilegales, inmorales, y
letales
Efectivamente, los excesos de microPartículas en suspensión, finas y
respirables; de Hidrocarbonos Aromáticos Policíclicos –PAHs-; y de
ÓxidosDeNitrógeno (NOx), procedentes de las emisiones tóxicas (ilegales, inmorales,
y letales) que emiten los tubos de escape de los abundantes motores diésel –además
de otros muchos gases y componentes tóxicos-, muy abundantes hoy en el aire
urbano y suburbano de las metrópolis europeas, son causantes directos de un
amplio espectro de graves enfermedades cardiovasculares y pulmonares en las
personas (cáncer de pulmón, asma, enfermedades pulmonares, cerebrovasculares,
cardiopatías e infarto, diabetes, obesidad, demencia, etc.); produciendo,
también, daños graves en el desarrollo cognitivo prenatal e infantil.
Como consecuencia de su letal toxicidad, los escapes diésel producen
millones de muertes prematuras ( 3,5
Ms en el mundo en 2016; 600k en Europa;
35k en España; –una tercera parte, niños menores de 5 años-), además de producir un exceso de costos
sanitarios directos -del orden del 3% del PIB-, según datos de la
OMS-Organización Mundial de la Salud (WorldHealthStatistics
2016), de NacionesUnidas, y de la Agencia
Europea del Medio Ambiente).
Partículas
Materiales Finas en suspensión PM2,5 y PM10 : gravemente tóxicas
Las Partículas Materiales en suspensión (PM) procedentes
de las emisiones tóxicas de los combustibles fósiles, particularmente de los
motores diésel, son una mezcla de partículas sólidas y gotas líquidas finas de
diferentes componentes con tamaños desde 1 nanometro (10 elevado a -9 metros),
hasta más de 100 micrometros de diámetro; por su tamaño se pueden agrupar en
Ultrafinas (<0,1 microm), Finas (de 1 a 3 mm),
y gruesas (>3 microm)
Las Normativas que limitan las emisiones tóxicas
clasifican las Partículas Materiales inhalables en dos tamaños: 2,5 y 10
(diámetros equivalentes inferiores a 2,5 micrometros –microm,
10 elevado a -6 m-, y entre 2,5 y 10).
Las PMs se emiten directamente –en la combustión de
combustibles fósiles-, y también se forman (PM primarias y secundarias, respectivamente) a través de
reacciones químicas -activadas por la luz solar- entre gases emitidos (p.e., Óxidos de Azufre
–SOx-,Óxidos de Nitrógeno –NOx-, y Compuestos Orgánicos Volátiles –COV-) en la
atmósfera.
Tienen una gran variedad de tamaños y formas, y contienen
centenares de tipos de diferente sustancias químicas orgánicas e inorgánicas.
Sus propiedades físicas y químicas varían ampliamente con el tiempo (incluyen
una compleja mezcla de componentes, como sulfatos, nitratos, carbón elemental,
y compuestos metálicos y orgánicos; pueden permanecer en el aire durante
semanas, y viajar miles de kms arrastradas por el viento.
El 90% de la población del planeta vive
en áreas que exceden los límites de contaminación que recomienda la OMS Organización
Mundial de la Salud (Datos de 2013). Las muertes ocasionadas por la contaminación del aire
(especialmente grave en concentraciones urbanas, debida a las partículas finas
en suspensión -PM2,5, las de mayor peligrosidad- crecen aceleradamente
desde 1990: desde 2013, las muertes prematuras ocasionadas por la contaminación
ambiental exterior ya superan a las originadas por la contaminación interior de
los hogares, estimándose en +3,5 Ms en 2016.
El aire envenenado con las emisiones tóxicas que están, de manera
constante, distribuida a nivel del suelo, además de un grave riesgo para la
salud de las personas que lo respiran, también es un lastre para su desarrollo
económico. Por ocasionar enfermedades y muertes prematuras, reduce el bienestar
y la calidad de vida; y por ser causa de pérdida de mano de obra, también
disminuye los ingresos de la sociedad; detiene el crecimiento de las plantas y
reduce la productividad de la agricultra; y, al disminuir el atractivo de las
concentraciones urbanas para los trabajadores de mayor nivel, perjudica la
competitividad de las ciudades. (“El Costo de la Contaminación Atmosférica”,
Banco Mundial. Instituto para la Medida y Evaluación de la Salud –“The Cost of Air Pollution”, World Bank . Institute
for Health Metrics & Evaluation-, 2016)
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